Tanto en Noches Blancas como en Retratos de una
Obsesión (One Hour Photo, 2002), el que es para algunos mas insoportable de
todos los actores de Hollywood demuestra un rango dramático
impresionante. Sy Parrish (Williams) es el encargado del laboratorio de fotografía de
una tienda departamental de una pequeña localidad. Para él, el revelado
de fotos es mucho más que un trabajo... es un arte por medio del cual
puede apreciar los pequeños detalles que conforman la vida de las
personas y que para la mayoría pasan totalmente desapercibidos.
Es todo lo que vamos a revelar acerca del filme, dirigido por el debutante director de videos Mark Romanek (Rolling Stones, Madonna, Nine Inch Nails, Audioslave), con lo que el estilo visual está más que asegurado. De hecho, los mayores aciertos de Romanek probablemente sean esos: el poderoso diseño visual y la grandiosa actuación de Williams, quien en ningún momento parece salirse de control ni perder la idea de su personaje, lo que es difícil de conseguir con alguien que está acostumbrado a improvisar y ser demasiado expresivo. El elenco cumple con su cometido, destacando el trabajo de Connie Nielsen (Gladiador).
Pero volvamos a Williams: su actuación es impecable, moderada, sutil, que revela a un gran actor. Con sus silencios, su lentitud de movimientos y su mirada, sugiere perfectamente la soledad de espíritu en la que se encuentra Sy. Ademas, tiene una relación con la cámara, que pocos actores han podido mostrar.
Retratos de una Obsesión (quizá un título mas representativo que el original -¿Se imaginan "Foto en una Hora"?) no es una de esas pelis que estén destinadas a generar camiones de dólares, pero tiene el valor de presentar una historia creíble con personajes comunes y corrientes, además de exponer el vacío emocional al que una sociedad tan impersonal como la norteamericana puede llevar a una persona que, en el fondo, lo único que necesita es un poco de cariño y atención. Es decir, tiene la rara cualidad de hacer pensar a la audiencia, lo que no es poca cosa.
Ficha Técnica: IMDB
Publicado originalmente en www.tljdigital.com
Es todo lo que vamos a revelar acerca del filme, dirigido por el debutante director de videos Mark Romanek (Rolling Stones, Madonna, Nine Inch Nails, Audioslave), con lo que el estilo visual está más que asegurado. De hecho, los mayores aciertos de Romanek probablemente sean esos: el poderoso diseño visual y la grandiosa actuación de Williams, quien en ningún momento parece salirse de control ni perder la idea de su personaje, lo que es difícil de conseguir con alguien que está acostumbrado a improvisar y ser demasiado expresivo. El elenco cumple con su cometido, destacando el trabajo de Connie Nielsen (Gladiador).
Pero volvamos a Williams: su actuación es impecable, moderada, sutil, que revela a un gran actor. Con sus silencios, su lentitud de movimientos y su mirada, sugiere perfectamente la soledad de espíritu en la que se encuentra Sy. Ademas, tiene una relación con la cámara, que pocos actores han podido mostrar.
Retratos de una Obsesión (quizá un título mas representativo que el original -¿Se imaginan "Foto en una Hora"?) no es una de esas pelis que estén destinadas a generar camiones de dólares, pero tiene el valor de presentar una historia creíble con personajes comunes y corrientes, además de exponer el vacío emocional al que una sociedad tan impersonal como la norteamericana puede llevar a una persona que, en el fondo, lo único que necesita es un poco de cariño y atención. Es decir, tiene la rara cualidad de hacer pensar a la audiencia, lo que no es poca cosa.
Ficha Técnica: IMDB
Publicado originalmente en www.tljdigital.com
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